Actividades deportivas para hacer con niños: YOGA

YOGA
para la mente - cuerpo- espíritu



El yoga se generó en la India hace miles de años. Muchas de las posturas imitan o representan a elementos de la naturaleza o el espíritu de los animales.


¿Cómo ayuda a los niños?

Les ayuda a entrar en contacto con la naturaleza y los ritmos de vida. Ayuda a mantener los huesos fuertes y músculos flexibles, mejorando su rendimiento físico ahora y en el futuro.

Con las posturas de equilibrio aumentan su capacidad mental y de concentración.

Al realizarlo de forma regular pueden aprender a controlar sus emociones y con ello descansar y dormir con mayor facilidad.

Con menores de 3 años es difícil realizar esta actividad, aunque pueden participar con nosotros mientras lo realizamos.
Con niños de 3 a 6 años, practicar yoga ha de estar más enfocado a estimular su creatividad, por ello las posturas deben incluirse mediante el juego. 
A partir de los 8 años ya se puede trabajar el yoga como tal, teniendo muy en cuenta las posturas correctas y sin forzar el cuerpo.

Beneficios 

Los beneficios son tanto para el niñ@ como para el adulto.

  • Potencia la flexibilidad y fuerza, ya que los músculos se relajan y alcanzan mayor flexibilidad y si se trabaja de forma rutinaria esta se tardará más en perder al ir creciendo. Fortalece partes del cuerpo que normalmente no trabajamos, como los hombros.
  • Mejora la postura. Al trabajar las distintas posturas que el yoga nos enseña, mejoramos mucho (y seremos más conscientes)las posturas diarias como sentarse en una silla, en el suelo, al andar...

  • Conciencia corporal. Descubriremos partes del cuerpo olvidadas (o ni reconocidas)y al trabajar ambos lados por igual se cree que organizaremos también ambos hemisferios del cerebro.
  • Respiración. La respiración es un elemento muy importante del yoga, ya que es el conductor y el enlace entre las distintas posturas. Desde bebés respiramos profundamente y según crecemos vamos perdiendo(por estrés o ritmo de vida) esta respiración que hacíamos inconscientemente, por ello hay que enseñar a los niños a mejorar la respiración profunda. Ayuda a calmar la mente y liberar emociones bloqueadas.
  • Técnicas de concentración. Centrar la mente es esencial al practicar el yoga. Visualizar y concentrarse hace que los niños sean consecuentes de su yo interior y evadirse de distracciones externas y así poder disfrutar más el momento.
  • Habilidades comunicativas. Todos sabemos que los niños imitan todo y el habla forma parte de ello. Al enseñarles posturas debemos nombrarselas y explicar como hacerlas, con ello ampliaremos su vocabulario.
  • Fomentar la autoestima. Cuando uno tiene una imagen positiva de uno mismo tiene más confianza. El yoga utiliza el lenguaje positivo, afirmaciones y visualizaciones que aumentan la autoestima.
  • Disciplina no competitiva. Al realizar yoga se diferencian varias partes, estiramientos-posturas-relajación, y junto a la concentración que se necesita, se crea una disciplina.

Se recomienda que los padres tengan algo de conocimiento o que asistan junto a sus hijos a clases para hacerlo en casa, para asegurar una buena postura y aprender la posturas básicas.