VISITAMOS EL PARQUE DE ATRACCIONES CON LAS NUEVAS MEDIDAS



Dudamos mucho si abrir nuestro círculo de actividad tras el confinamiento. No tenemos muy claro que el término "nueva normalidad" sea el adecuado, pero sí queremos crear una normalidad en lo que estamos viviendo.
Durante el confinamiento nuestra normalidad se convirtió en salidas a la calle muy restringidas para los adultos y nula para el niño, el trabajo parecía inexistente y yo conocí lo que significaban las siglas ERTE. Nos adaptamos a ello y entre los deberes, la compra semanal y los aplausos en la ventana normalizamos 3 meses. Después pudimos salir, poco a poco, donde la mascarilla y el gel se convirtieron en acompañantes inseparables.



Ahora que ya no hay #coleencasa empezamos a ver a la familia, a algún amigo y tenemos la esperanza de poder refrescarnos en la piscina, subir a la sierra o quizás ver la playa, siempre con nuestros fieles acompañantes (mascarilla y gel) y guardando las distancias. 

Tengo claro que nuestro deber, con nosotros mismos y con los demás es cumplir con estos tres simples gestos y lo haremos vayamos a donde vayamos, pero las instituciones o los recintos de ocio ¿también lo tienen tan claro? Es la duda que nos surge cuando pensamos en alguna actividad en familia, donde no estaremos solos y es necesario interactuar con otros o usar algún espacio común.


Este fin de semana fuimos al Parque de Atracciones de Madrid, tras ver en su web las medidas de higiene y limpieza y el límite de aforo, decidimos equiparmos para pasar el día.
Las entradas las cojimos por la web y vimos las atracciones que no estarían en funcionamiento, así podíamos evitar contratiempos al ver la atracción cerrada. En nuestro caso no funcionaron tres atracciones infantiles y la casa de Bob Esponja, aquí podéis ver las atracciones cerrradas.

Infografía del Parque de Atracciones de Madrid

Como medida preventiva, hacen incapié en llevar varias mascarillas de repuesto, por si se mojan en las atracciones de agua, para favorecer el uso correcto de la mascarilla venden un paquete de 5 en las taquillas, con un coste de 4,80€.

Al llegar vimos muy poca gente y así lo confirmamos durante casi toda nuestra estancia, a partir de las 18 notamos que había algo más de gente. 
Por protocolo ya no reparten el mapa del parque en papel, pero hay varios planos en tableros por distintas zonas. 
Aunque hacía un año que no  lo visitábamos, el peque recordaba muy bien hacia donde teníamos que ir para llegar a sus atracciones preferidas.
La zona de Nickelodeon estaba desierta, así que nos dimos un paseo en tren para verlo todo desde arriba.




La reducción de aforo nos permitió repetir de atracciones sin casi esperar cola, Magneto de Jimmy Neutrón, la montaña rusa de la Patrulla Canina, Padrinos voladores y Splash Bash fueron las más visitadas. En cada turno se acomodan a las familias juntas, no se mezclan grupos, y es muy posible que la atracción se inicie sin estar completa, muchos subimos un adulto con los peques y no llenamos el vehículo o el bagón. En el espacio dedicado a seguir la cola para la atracción, está señalizado en el suelo las distancias para respetar el espacio con el grupo anterior. A  los peques les ha sido muy fácil y natural esperar el turno e ir de circuito a circuito. 

Las atracciones de agua fueron en las que más disfrutaron los peques, como hacía calor las visitábamos cada dos atracciones en seco. Como el peque mide más de 1,20m pudo montar en varias atracciones de más mayores como el aserradero, los fiordos, los rápidos y las sillas voladoras.




Cada atracción en la que montamos era rociada con un spray con solución hidroalcohilica, asiento y agarraderas y antes de subir hay que higienizsrse las manos en un dispensador. Nos pareció suficiente entre pase y pase, es verdad que puede que con el rociado no llegase a todas las zonas, pero nuestras ropas no permitían que tocase nuestra piel con el asiento y nuestras manos estaban cubiertas por la capa de gel.

Llevar pantalones piratas y camiseta de media manga es la ropa que yo recomendaría llevar, sobre todo para aquellos que se sientan más cómodos si no tocan directamente el habitáculo de la atracción.
Todos deben lavarse con el gel, la verdad es que sobre todo para los niños me parece muy agresivo y creo que en las atracciones infantiles se podía haber buscado una solución con agua y jabón. 

Durante nuestra estancia vimos a varias personas equipadas con monos y rociadores que limpiaban las atracciones que a ratos estaban paradas. Al igual que vimos varias veces desinfección en los aseos. Por cierto el jabón en los aseos me pareció escaso. 

Todo el personal llevaba mascarillas al igual que debíamos llevar los visitantes. Es una de las normas que ves reflejadas en muchos lugares del parque al igual que en la web. 




Nos llevamos la comida, así que no fue necesario usar los restaurantes. Pero en las tiendas pequeñas los dependientes estaban separados por una mampara y por supuesto había que higienizsrse al entrar. 
Comimos en el merendero, también puedes sentarte en la zona verde, manteniendo las distancias. En el merendero casi todos nos colocamos con una mesa libre de distancia, está claro que muchos somos los que estamos concienciados en las tres medidas básicas (mascarilla, lavado de manos y distancia).
Muchos loros nos visitaron durante el descanso de las atracciones, los niños disfrutaron intentando alcanzarlos y jugando en la pradera que está cerca del merendero y tenía sombra.

Los personajes d ela Patrulla Canina y de Bob Esponja tenían momentos de aparición y podías hacerte fotos a distancia, teniendo un par de escalones de separación con ellos. 
También estaba abierto la sala del auditorio, para los pases de espectáculo. No entramos, pero por la cola vimos que ese aforo también era reducido y había personal del parque.





Pasear por todo ese espacio, permitiendo la distancia social, de la poca gente que había (salvo a partir de las 18:00, que ya en la zona de adultos no podías tener esa distancia), repetir en las atracciones y disfrutar de un día muy agradable (de verano, pero agradable) con sonrisas continuas de todos, hizo que pasásemos un día estupendo. 

Por desgracia no será una actividad que hagamos a menudo, como lo haríamos otro verano cualquiera, pero como minicapsula para romper la rutina nos ha parecido bien. 
Tenemos claro que este verano será de mini cápsulas, poder deisfrutar de una propuesta así cada una o dos semanas será nuestro salvavidas para superar el verano del covid. 

Si participas en esta propuesta u otras semejantes, si viajas a la playa, si vas a la piscina, si sales con amigos o familiares, por favor, usa siempre la mascarilla, lávate las manos y mantén la distancia. De este modo todos podremos disfrutar de estas cápsulas de ocio. 


Nota: Recuerda llevar gorra, crema solar y ropa de cambio (los secadores que hay por el parque no están funcionando)