Y DESCUBRIÓ LAS PINTURAS DE CARA



Esta mañana, el peque no tenía ganas de salir a la calle y prefirió pintar. Es una actividad que le ha gustado desde siempre, aquí te lo conté cuando tenía 15 meses.
Como cada vez que pintamos sin tener claro muy bien con qué o el tamaño que necesitamos, extendemos papel continuo en la terraza colocamos la caja de pinturas cerca.



Esta caja de pinturas ya no sólo tiene ceras o lápices de colores, también rotuladores, ceras tipo Manley que se secan rápido, Manley, temperas, pinturas de dedos, acuarelas y la novedad pinturas de cara. 
Todas estas pinturas ya las usó de una a una, en principio con supervisión y aprendiendo las distintas formas de usar cada material y su limpieza posterior. Cuando veo que puede usar un material él solo, lo coloco en la caja y así tiene total libertad de uso y yo seguridad y confianza.
No se por qué no había metido las pinturas de cara, hace tiempo que le gusta disfrazarse y pintarse, aunque para esto último me pedía ayuda. El caso es que me acordé de ellas y las metí esta mañana.

El peque empezó a pintar con los rotuladores, suele ser lo primero que saca y se va directo al naranja (su color preferido, como dice él), pasó a las ceras y después a las acuarelas. Para esto último me pidió un poco de agua.
No siempre pinta a su aire, a veces me pide que le ponga las vocales o todas las letras o pintamos cada uno un monstruo y le ponemos las partes de la cara. Hoy eligió hacer un monstruo con lengua muy, muy larga.


¿Lo veis?si hombre, este muñecote naranja

Parecía que ya se aburría un poco, después de gran parte de la mañana, y nos tomamos un piscolabis


Parecía que iba a recoger cuando.....descubrió las pinturas de cara.
- ¡Mamá, aquí están!
- ¿El qué?
- ¡¡Para pintar la cara!!
Estaba todo emocionado, intentaba pintarse pero como hemos gastado la punta no recordaba que tenía que girar la punta y se enfado un montón. ¿Los vuestros no se enfadan cuando no pueden hacer algo?el peque se pone de los nervios.

Cuando consiguió sacar la pintura le puse un espejo frente a él e intentó pintarse la cara, unas cuantas líneas por la frente y los mofletes y desistió. Debe ser que no le quedaba como él quería.
Le propuse que pintase a su muñeca Rosi, es un babypelon de Jugueterapia a la que tiene mucho cariño. Pues no la dejó un hueco libre, ¡pintada por todas partes!


Después la limpió un poco con toallitas, porque decía que ya no tenía espacio, y vuelta a empezar y a mirarse al espejo.


Os podéis imaginar como terminaron los dos, para meterlos en la lavadora. Pero esto es lo bueno de ensuciarse, que luego te puedes bañar y bañar a tu muñeca. La dejó limpísima.